Confesiones de Medianoche: `Mis relaciones con otros chicos no pasan los cuatro meses´
18.Nov.2023. Anécdotas. Conocí a ese último chico por Manhunt. Esa página que todos los gays conocemos para conocer a otros chicos y que ya no es tan popular como una vez lo fue. Allí lo vi por primera vez. Simpático, originario de otra ciudad, pero viviendo en la mía desde hace unos años, por trabajo.
¿Que cómo era él físicamente? Se los describo para satisfacer su curiosidad: un chico de 1,78 de alto, blanco tostado, cabello castaño, ojos achinados color negro, nariz perfilada, complexión delgada.
¿Que cómo soy yo físicamente? 1.73 de alto, moreno claro, cabello negro, ojos achinados negros, complexión media y me desempeño trabajando como DJ y bartender.
La primera vez que conversamos por dicha página de contactos me comentó que que le llamaba la atención que yo fuera DJ.
Lo que más me gustó de él fue que a medida que conversábamos nunca mencionó los clichés de una conversación en Manhunt o en cualquier otra App para conocer a otros que tanto me moletan. Me refiero a preguntas como:
- “¿Qué rol eres?”
- “¿Qué buscas”
- “¿Tienes automóvil?”
- “¿Tienes sitio?”
En fin... nuestra conversación fluyó de otra manera. Más natural, más liviana. Al final intercambiamos números de teléfonos y facebook, mientras charlábamos de miles de cosas triviales.
El primer encuentro
Lo invité a mi casa a cenar, ya que sentí la suficiente confianza para hacerlo. Para relajarnos nos tomamos unos tragos que se extendieron, sin quererlo. Luego nos sentamos a cenar, continuamos bebiendo y hablando hasta que me comentó que "se sentía como pasado de tragos”.
Le respondí que se recostara en mi cama. Lo llevé a mi habitación, encendí el aire acondicionado y en lo que salía me dio un beso. Vaya, ¡qué beso! En ese momento las manos se me fueron solas. Sin embargo me contuve ya que no quería que las cosas pasaran así. Le dejé descanzar y no pasó nada más.
En este momento, mientras escribo estas líneas, no sé si fui muy tonto al actuar de esa manera, pero sentía que las cosas no debían fluir de esa forma.
1er Mes
Mantuvimos contacto casi a diario. Casualmente se acercaba la Semana Santa y como mi mamá tiene un apartamento en la playa, aproveché de invitarlo para pasar unos días allí. No iban a ser muchos días ya que trabajo de DJ y bartender y esos días son de mucho trabajo, con fiestas de Jueves a Sábado.
Justo el último día, cuando estábamos a punto de comenzar a alistarnos para retornar a la ciudad fue cuando tuvimos nuestro primer encuentro íntimo. Estaba bañándome cuando de pronto alguien tocó la puerta. Cuando abro, estaba él sujetando dos copas de vino en la mano, preguntándome si se podía duchar conmigo... lo que pasó después queda a su imaginación...
A partir de allí comenzamos a vernos más a menudo. Entre salidas al cine y visitas a mi casa, fue conociendo a mi familia y de alguna forma, convirtiéndose en parte de ella. Afortunadamente cuento con una familia super entendida, gracias a Dios. Mi familia comenzó a tomarle cariño y yo en mi mente estaba seguro... "este chico es para mí, es el que estaba esperando".
2do Mes
Continuamos hablando casi a diario. Soy una persona muy detallista y para conmemorar los dos meses le preparé una caja con 12 rosas verdes, su color preferido, chocolates, una foto del primer dia de conocernos, un CD con canciones románticas, una pista hecha por mi y una carta en donde le expresaba mis sentimientos.
No se me olvidará lo que pasó al momento de entregarle la carta. Fue una escena tipo novela ya que él trabaja como centralista de una línea de taxis y trabajaba de noche ese día. A las dos de la madrugada me escapé de la disco donde trabajaba.
Le pedí a un amigo que es taxista que me llevara para llevarle los obsequios. Cuando llegué a su trabajo estaba lloviendo, le entregué todo lo que tenía para él y su cara de sorpresa era inolvidable. Sus ojos le brillaban cual diamante.
Rápidamente me fui de allí. Lo dejé sin palabras. Fue por mensaje donde me expresó que lo había dejado muerto de sorpresa con el detalle y que sus compañeros estaban copiando la idea.
3cer mes
Seguímos hablando casi a diario. En una oportunidad lo invité a mi trabajo. El se apareció en el local con dos personas: una amiga y un supuesto amigo. En mi hora de descanso me acerqué a donde ellos se encontraban. Fue allí cuando comenzó mi pesadilla.
Mientras hablaba con su amiga vi que el y su amigo se daban un beso en los labios. La sensación fue terrible. No por el beso si no por el desplante. Por no haber sido claro conmigo.
Aun cuando nuestra relación no tenía nombre, estaba seguro de que ambos sabíamos que estábamos al inicio de una relación. Que no se trataba de un simple “chance”, o como yo lo llamo un simple “cafecito de una tarde”. Esa misma noche tuvimos la oportunidad de conversar y luego de sus explicaciones me comentó que ya no se vería mas con el supuesto amigo.
Un par de semanas después fue día del Orgullo Gay y lo vi de nuevo con su "amigo". No soy santo, así que hice lo mismo. Me entretuve con chicos que se interesaban en mí bueno y con los que he tenido algo en el pasado. Él estaba molesto. No le gustaba que se me acercaran para conversar.
Poco tiempo después, estando en mi trabajo, me comentó que él estaba saliendo con alguien más. En ese momento me sentí muy mal ya que me estaba ilusionando y mis sentimientos iban más allá.
No sé si los sentimientos se pueden controlar o medir pero me dijo que estaba saliendo con el chico que se había dado un beso en el local donde trabajo, el mismo con que había ido al orgullo. Que ese chico quería que ellos fuesen pareja. Me dijo que él le respondió que no podía corresponderle y que sentía algo por mí. Aun así me dijo que necesitaba tiempo para aclarar sus sentimientos y que le diera hasta el 1ero de agosto para darme una respuesta de lo que haría finalmente. Fueron días de incertidumbre y ajetreo ya que se acercaba mi acto de grado.
4to mes
Pasaron los días y entre los actos protocolares de mi graduación y el estrés no nos veíamos tanto como habría querido. Ya no hablábamos todos los días. En pocas palabras, no se había definido qué sucedía entre ambos.
Mi acto de grado iba a realizarse el 8 de Agosto. Su cumpleaños era dos días después (el 10 de agosto). Sin duda un mes interesante ya que mi cumpleaños era el 15 de Agosto. Para serles honesto, pensé que serían días de alegría. Me permití comprarle un obsequio: una camisa, la cual se la di antes de su cumpleaños.
Mis detalles hacia el no terminaron allí. Contaba con tres pases para mi acto de graduación, uno para mi mamá, otro para mi papá y el tercer pase no lo compartí con ningún otro familiar. Quería que él estuviera conmigo en esa noche especial.
Mi graduación fue un día muy especial, estaba con mis padres y con él. El día quedó inmortalizado en fotos, así como la algarabía y la emoción, las cuales nunca olvidaré. Celebramos con mi familia, luego en la noche tenía una celebración en mi trabajo, y finalmente una celebración con mis amigos. Él estuvo conmigo en todas las celebraciones.
Dicen que a veces, algunas cosas son demasiado buenas para ser verdad. Pues entre tragos y risas a él le entró un ataque de honestidad, comentándome en un momento de la noche que se había hecho pareja del supuesto “amigo”.
¿Qué se debe sentir al experimentar algo como esto? Me sentí burlado engañado, como el peor tonto del mundo. Parecerá algo novelesco, pero en ese momento sentía que mi corazón era de cristal y que había explotado una bomba dentro de él. Se me nubló la mente. Me deje llevar por la ira y el dolor. De alguna forma perdí el juicio y nos fuimos a los golpes.
Reconozco que no fue mi mejor reacción (no suelo ser así), pero en ese momento lo sentí. El día más feliz de mi vida se había transformado en una pesadilla, un día lúgubre. Mi familia y amigos presenciaron aquél desastroso episodio y se lo llevaron fuera de mi presencia.
Luego supe que le comentaron que no es de hombre andar jugando con los sentimientos de nadie. Lo que uno hace mal en la vida se devuelve (como un boomerang). Y que todo lo que hagas aquí se paga y multiplicado por tres. De más está decir que mi cumpleaños fue una fecha sin sentido para mi. Aunque no me tocó más remedio que continuar con mi vida y una vez más, mis relaciones con otros chicos no pasan los cuatro meses.
Ya ha pasado algo de tiempo. Ya las heridas son simples cicatrices. De todo esto obtuve algo positivo. Creo que la lección aprendida es no ser tan apasionado con alguien que te hace una simple caricia o te da un beso. Aprendí que de ahora en adelante debo vivir el momento y siempre esperar lo peor de las personas. La gente no siempre es lo que parece.
Mario Olavarría
Alguien que no cree en las relaciones
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